¡NO MÁS RESOLUCIONES BLA BLA BLA! ¡LOGRA TU SUEÑO YA!

¿HART@ DE RESOLUCIONES BLA BLA BLA? ¡LIBÉRATE YA!

Dra. Bethania Escotto

¡Mira el video!

Se nos acaba un año y empieza otro lleno de retos y de posibilidades, y tú no quieres quedarte atrás ¿verdad que no? 

Entonces libérate ya de las resoluciones bla bla bla y vé por tu felicidad y tu logro.

¿Y cuáles son las resoluciones bla bla bla?
Sencillo, casi todas. Esas que escribimos y no cumplimos. Esas que ya nos tienen hasta el cuello, cuando reaparecen cada año para recordarnos otra vez lo que NO hemos logrado.

Entre las más famosas: Bajar de peso, mejorar las finanzas, terminar la tesis, hacer ejercicios, comer saludable, manejar mejor el tiempo etc.

¿Y qué me dices de las que se toman involucrando a otros que no están interesados? Como el papá que dice a sus hijos adolescentes -Mi resolución es, que este año vamos a pasar más tiempo juntos como familia; Y los muchachos dicen -ujum. Obvio, no están en eso ya ¡Se te fue la guagua darling!

Y tú ¿Qué es lo que vas a hacer para que tus resoluciones ya no sean puro bla bla bla? ¿Cómo vas a diseñarlas para que te motiven a largo plazo, para que le inyectan felicidad y entusiasmo a tu vida ¡Para que se realicen por Dios!

Sencillo, Mira lo que vas a hacer:

1-Simplifica tus resoluciones, resúmelas, vé al objetivo. Si estás muy inspirado puedes crear un documento aparte y escribir todos los detalles que se te antojen, pero el objetivo mantenlo claro y simple.

2-¡Atrévete! Deja de escuchar a motivadores desmotivados. O sea, Si te dicen que tus resoluciones tienen que ser realistas ¡mentiras!  No importa lo grande que parezcan, si estás dispuesto a caminar hacia ellas, entonces son realistas para ti.

3-Expresa tus resoluciones de manera afirmativa y con verbos. Nada de empezar con -Voy a perder o a bajar o no hacer tal cosa. En Programación Neurolinguística sabemos que sicológicamente nadie está buscando prohibiciones ni perder nada. Eso te podría bloquear sin darte cuenta.

Así que: 

Envés de hablar de no ver tanta televisión, puedes hablar de utilizar mejor tu tiempo.

Envés de hablar de no seguir trabajando para otros, puedes hablar de iniciar un negocio propio ¡yes!

Envés de hablar de perder peso, puedes hablar de recuperar tu hermosa figura.

¿Ves la diferencia? El no ya los tenemos, vamos por el sí.

4-Presenta tus resoluciones al Dios que nos ama con amor infinito y saboréate la idea, visualízala con alegría, adéntrate en ella como si ya la hubieras cumplido. Recuerda, lo que desatamos aquí en la tierra, también es desatado en el cielo.

5-Traza un plan y da el primer paso inmediatamente. Te voy a contar mi secreto, y te aseguro que me ha ido muy bien con la gran mayoría de mis resoluciones.

Cada año, al final de noviembre ya tengo lista mis resoluciones. Entonces las practico durante todo el mes de diciembre. Así, las internalizo, hago el hábito, y en enero ya estoy a toda máquina.

No importa en qué parte del año estamos ahora que lees esto. Estás a tiempo para empezar ¡Voy a nosotros! No más bla bla bla ¡Vengan las realizaciones y los logros! Que así nos ayude Dios, amén…

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