EL DUELO MIGRATORIO ¿CÓMO SUPERARLO?
Caminante, son tus huellas
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.
Antonio Machado
De migrante a migrante te hablo esta vez...
Dra. Bethania Escotto
¡Mira el video!
¿QUÉ ES LO QUE SIENTE EL QUE SE VA DE
SU PAÍS A VIVIR EN UN PAÍS EXTRAÑO? ¿CÓMO SUPERARLO?
La verdad es que cuando escuchamos la
palabra viajar, pensamos en diversion, aventura.
Ahora cuando se trata de dejar
nuestro país de origen para vivir en uno distinto, puede ser también muy emocionante. Sin
embargo trae consigo unas implicaciones en casi todos los aspectos.
Como ave que se vade su nido -dice proverbios
- así es el hombre que se va de su lugar.
Sin embargo, la migración es tan
antigua como el ser humano, solo que la mayoría de las veces se analiza este de
una forma colectiva. En Felices por decision miramos qué se siente a nivel
personal.
Se le llama duelo migratorio
porque la migración trae consigo no una,
sino muchas pérdidas psicológicas y sociales.
Es un duelo por el idioma, cultura,
familiares y amigos, comunidad religiosa, status social etc.
El duelo migratorio es algo que lo
sufre tanto el que se va, como también el que se queda.
Cada persona lo vive de manera
distinta, dependiendo de las condiciones en que se da el cambio, lo que se
deja, lo que se encuentra.
Y sobre todo del equipaje emocional
que traes contigo (tus experiencias, tu manera de ver la vida, de manejar situaciones,
tus valores).
Hoy día, en muchos casos la
tecnología puede ayudar, aunque no sustituye el calorcito del abrazo y de la
presencia de los seres queridos. Pero puede ayudar mucho en el aspecto de la comunicación
con los que dejamos atrás.
Siempre y cuando no se utilice como
sustituto pudiendo retrasar la integración del migrante en su nuevo entorno.
¿QUÉ ES LO QUE SIENTE EL QUE SE VA?
Cabe preguntar qué no siente.
Además
de ser un duelo como otro cualquiera con sus etapas características:
negación, coraje, negociación, depresion
y aceptación.
En sentido general suelen aparecer
sentimientos de desorientación prolongada, aislamiento, resistencia a la nueva
cultura, dificultad para establecer un ritmo de vida normal;
Soledad, sentimiento de fracaso, de
miedo y en muchos casos el sentimiento de tener que luchar para sobrevivir en
condiciones de explotación o humillación.
Sentimientos muy frecuentes son:
nostalgia, tristeza, soledad, llanto, cambios de humor, desarraigo,
sentimientos de culpa. En ocasiones hasta ideas de muerte, somatizaciones y
desordenes psíquicos.
Los sentimientos de la persona que se
va se agravan cuando se deja atrás padres mayores, hijos pequeños, pareja o
cuando se ha dado bajo condiciones extremas como precariedades económicas,
guerras, violencia, persecución.
En cierta etapa, cuando el migrante
tiene la oportunidad de visitar su país, puede sentirse desconcertado porque siente
que ya no se encaja ni en el nuevo país ni en el propio. Sin embargo eso solo es parte del
proceso de reajuste emocional y pasará.
AHORA BIEN ¿QUÉ PUEDES HACER PARA
SUPERAR EL DUELO MIGRATORIO, LLAMADO TAMBIÉN SÍNDROME DE ULISES?
1- Dale espacio al duelo
Con mucha paciencia contigo mism@ y
con quienes emigran contigo. Hay que tener en cuenta que el proceso migratorio
es un cambio muy drástico.
Sin embargo si lo asumes de una
manera saludable puede resultar siendo una experiencia de mucho crecimiento, en
la cual incluso descubres una serie de habilidades y fortalezas que ni sabías
que tenías.
2-Acepta el cambio con sus ganancias y sus pérdidas.
Lo fuerte del duelo migratorio es que cuando te vas tienes que lidiar no con una, sino con muchas pérdidas.
Aún cuando vayas en busca de una vida
mejor y la encuentres, irremediablemente dejas atrás muchas cosas que eran
parte de tu vida misma.
De hecho todos los cambios están
llenos de ganancias y pérdidas. No puedes tenerlo todo al mismo tiempo, la vida
es así y qué bueno.
3-Concéntrate en todo momento en el propósito.
Cuando te concentras en lo que fuiste
a hacer a ese país y te ocupas día a día de lograrlo, va a llegar el momento en
que los beneficios serán mayores que las pérdidas y te vas a sentir que estás
en control de tu destino.
El sentimiento de logro terminará
siendo mayor que la nostalgia de lo que has dejado atrás.
Definitivamente al vivir con propósito
se es mucho más feliz en cualquier lugar del mundo.
4-Evita las idealizaciones de uno u otro lugar.
En muchas ocasiones, antes de irse el
emigrante suele idealizar el destino; luego cuando llega resulta que no todo es
como le habían dicho o como se imaginaba.
En ese sentido puede ayudar mucho el
concentrarte no solo en qué puedes obtener de este nuevo lugar sino en qué
puedes aportar.
Por otro lado en ocasiones podrías
llegar a idealizar tu país de origen
aunque en el fondo bien sabes de lo que carece, de otro modo talvés no te
hubieras ido.
En fin, para mantenerte en balance
tienes que estar clar@ que no hay lugar perfecto en el mundo, que nuestra
actitud de gratitud, aceptación, concentrarnos en lo positivo puede hacer una
gran diferencia en cualquier lugar.
5-Entabla nuevas relaciones
Procura conocer la nueva idiosincracia,
no esperes que las personas se comporten como lo hacen las que dejaste atrás.
Nada de comparar ni tampoco sustituir, es formar relaciones nuevas.
6-Desarrolla intereses en el nuevo ambiente
Sumérgete en la cultura del nuevo
país. Si te gustan los deportes, la música o algún pasatiempo, interésate por
ello, conoce la cultura, ábrete a esa nueva experiencia, ya verás como te vas
encariñando.
7-Lo más importante: Desarrolla el aspecto espiritual de tu vida
Ese es el que puedes llevar contigo a
donde quiera que vayas. Esa confianza en el Dios que conoce el panorama
completo de tus idas y tus regresos y siempre está ahí para ti en cualquier
lugar, porque te ama con amor infinito.
Eso sí,
procura no caer en el desarraigo que a veces viene por el temor a sufrir nuevas
despedidas, como hablábamos en la tertulia #5.
No es lo
mismo decir como la canción no soy de aquí ni soy de allá, o soy ciudadano del
mundo porque has ampliado tus horizontes, que convertirte en alguien a quien ya no le huelen las azucenas.
Date la
oportunidad de ser feliz en cualquier lugar donde estés ¡y que sea por decision! Dios contigo.